¿Eres de las personas que tienen muchas ideas y proyectos? Comparto contigo algunos tips




Si eres de esas personas creativas que tienen demasiadas ideas y que sienten agobiados al no saber por donde empezar, déjame decirte de que no estás solo. Lo que es importante que comprendas de que si tienes demasiado dentro te será difícil de administrar, así que debes organizarte.


No hay nada de malo en tener demasiadas ideas. Lo importante es definir que hacemos con ellas. Lo mejor es sacar todo de tu cabeza, consigue un cuaderno en el que escribes esas ideas.

Como empresaria independiente que soy, suelo organizar mis ideas seleccionándolas por categorías: lo que es a corto, mediano y largo plazo. Pero NO LAS ELIMINES ninguna. Te lo digo por experiencia. Tengo ideas de hace dos años que recién estoy poniendo en ejecución, y eso es porque al escribirlas me di cuenta que estaba saltando etapas y enfoqué mi atención en los pasos que me llevarían a que esa idea tenga éxito.

Verás con el tiempo de que hay ideas de que se complementan, hay algunas que se convierten en negocios, otras serán artículos de blog y otras tal vez conferencias. Cada idea que tienes es valida. Pero OJO si te decides cambiar de rumbo, no te sientas mal de dejar ir algunas ideas, eso es sabiduría de poder enfocarte en lo que si confías y poder dejar algo de lago. Te va a suceder en cierto momento de que una vez la escribes la idea y la analizas, te das cuenta de que no es prioridad y decides no invertir tiempo en esto. o tal vez era simplemente una grada que te llevaba a la siguiente etapa.

No te asustes de tener ideas. Eres muy afortunado de tener ese beneficioso problema. Tomate el tiempo para reflexionar y organizarte;  verás como te sentirás aliviado cuando hayas terminado.

Jiro Kawakita, un profesor japonés de antropología cultural, desarrolló un método para sortear ésta dificultad. El método se llama KJ, en su honor, aunque es también conocido como Diagrama de Afinidad. Consta de cuatro pasos sencillos y está diseñado para usarse en grupos, en el trabajo en cualquier tipo de organizaciones, desde empresas hasta escuelas. Estos son los cuatro pasos que comparto hoy contigo a ver si te sirven de ayuda:

1. Preparar las Ideas: Escribe cada idea que se te haya ocurrido en notas adhesivas (post-it) y ubícalas al azar en un pizarrón o en una pared amplia y despejada. Posteriormente, debes ubicar otra nota adhesiva con el objetivo general o problema que se intenta resolver, para que tu y/o tu equipo mantenga el foco en él.
 2. Categorizar: Posteriormente se deben clasificar las ideas , ubicándolas en categorías que estén relacionadas con su funcionalidad, características, implementación, resultado esperado o cualquier otra forma de agrupar que tenga sentido en ese caso específico. Lo importante es separar y clasificar. Reubica las ideas que pertenecen a una misma categoría una encima de otra, de manera que se vea rápidamente cuantas ideas  hay de cada tipo. Las que no encajen en ninguna de las categorías pueden dejarse por separado.
3. Etiquetar cada categoría: Se debe revisar nuevamente todas las categorías que se escogieron y ponerles un nombres, que debe ser corto y representar el tema o concepto que hay detrás de ese grupo. Por ejemplo, si estamos buscando ideas para bajar los costos de producción, podríamos tener ideas en las categorías: reducción de desperdicios, cambios de tecnologías, cambios de proveedores, etc. No puede haber dos categorías con etiquetas similares. Si las hay, unifícalas. Al contrario, a medida que se avace en el trabajo quizás se necesite dividir algunas categorías en dos o cambiar la ubicación de algunas ideas para que encajen mejor
4. Votar por las ideas: El método KJ se utiliza para categorizar y priorizar ideas, es decir elegir aquellas que tienen más mérito o son más promisorias. Esto último se hace votando y hay distintas maneras de hacerlo. Por ejemplo en el desarrollo de ideas en equipo podría ser de la siguiente manera:
  • Se puede dar a cada miembro del equipo de 3 a 5 votos para que asignen a la misma idea o varias. Las que obtienen más votos son discutidas más en profundidad y pueden seguir siendo desarrolladas.
  • Se puede discutir sobre las ideas tratando de llegar a una elección por consenso. Esta opción toma más tiempo, pero suele ser más sólida para la implementación posterior.
  • Si hay muchas categorías se puede votar primero por las categorías más promisorias y luego pasar a votar por las ideas en las categorías más votadas.
Cualquiera de las opciones que tome le permitirá hacer la selección de la mejor manera posible, dados su conocimiento y el del resto del grupo.

Espero que te sirva de ayuda para llevar a cabo algún proyecto que tengas en mente... y si tienes algún tip que te funcione, no dudes en compartirlo por aquí,

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